- Introducción a las infecciones del recién nacido
- Sepsis en el recién nacido
- Infecciones nosocomiales (intrahospitalarias o contraídas en el hospital) en recién nacidos
- Neumonía en los recién nacidos
- Meningitis bacteriana en recién nacidos
- Listeriosis en recién nacidos
- Conjuntivitis en el recién nacido
- Infección por el virus del herpes simple (VHS) en recién nacidos
- Infección por el virus de la hepatitis B (VHB) en recién nacidos
- Infección por citomegalovirus (CMV) en recién nacidos
- Rubéola en recién nacidos
- Sífilis en recién nacidos
- Toxoplasmosis en el recién nacido
- Tuberculosis (TB) en recién nacidos
Recursos de temas
Estas infecciones pueden estar causadas por bacterias, virus u hongos.
Los síntomas son variables, pero pueden incluir vómitos, fiebre y una erupción.
El diagnóstico se basa habitualmente en la exploración clínica.
El tratamiento de las infecciones se basa en cuál sea su causa.
Varias medidas, como el lavado de manos, pueden ayudar a prevenir el contagio de infecciones.
(Véase también Introducción a las infecciones de los recién nacidos.)
Algunos recién nacidos contraen una infección después de ser ingresados en el pabellón de neonatos, en lugar de contraerla a través de la madre en el útero o durante el parto. Algunas veces no está claro si la fuente es la madre o el entorno hospitalario.
Las infecciones contraídas en el hospital son problemáticas mayoritariamente en los recién nacidos que tienen que permanecer en el hospital durante mucho tiempo, por ejemplo, recién nacidos prematuros, y los recién nacidos a término que sufren trastornos médicos graves.
Las infecciones hospitalarias más frecuentes son la neumonía (infección pulmonar) y las infecciones de la sangre (bacteriemia) consecuencia de la inserción de un catéter en una vena (también llamado vía intravenosa) para administrar al recién nacido líquidos o fármacos.
En recién nacidos a término, la infección más frecuente contraída en el hospital es una infección de la piel causada por la bacteria Staphylococcus aureus. A menudo, estas infecciones no se notan hasta que el recién nacido está en su hogar.
En lactantes de muy bajo peso al nacer, la mayoría de las infecciones contraídas en el hospital también están causadas por estafilococos. Sin embargo, otras bacterias y hongos también son causas. Cuanto menor es el peso al nacer, mayor es el riesgo de infección, especialmente en los recién nacidos que necesitan un respirador o una vía intravenosa durante un período prolongado. Cuánto más tiempo pasan los recién nacidos en pabellones de cuidados especiales neonatales o en unidades de cuidados intensivos neonatales (UCIN) y cuántos más procedimientos se les aplican, mayor será su probabilidad de infección.
Síntomas de las infecciones nosocomiales (intrahospitalarias o contraídas en el hospital) en recién nacidos
Los síntomas de infección en los recién nacidos tienden a ser inespecíficos. Por ejemplo, los recién nacidos pueden presentar vómitos o mala alimentación, aumento del sueño o letargo, fiebre o baja temperatura, respiración acelerada, erupciones, diarrea o abdomen inflamado.
Diagnóstico de las infecciones nosocomiales (intrahospitalarias o contraídas en el hospital) en recién nacidos
Varias pruebas
La sospecha de infección contraída en el hospital se basa en el estado del recién nacido y en un reconocimiento médico.
Luego, los médicos pueden analizar muestras de sangre, orina y líquido cefalorraquídeo para determinar dónde está la infección y qué microorganismo la está causando.
Tratamiento de la infecciones nosocomiales (intrahospitalarias o contraídas en el hospital) en recién nacidos
Depende del microorganismo
El tratamiento de las infecciones intrahospitalarias (infecciones contraídas en el hospital o infecciones nosocomiales) depende del microorganismo específico causante de la infección.
Prevención de las infecciones adquiridas en el hospital en recién nacidos
Las medidas generales adoptadas por el personal del hospital para prevenir las infecciones nosocomiales son:
Medidas para reducir la propagación de Staphylococcus aureus
Prevención de la propagación e infección en pabellones de cuidados especiales neonatales como unidades de cuidados intensivos neonatales (UCIN)
Lavado de manos minucioso
Monitoreo de la infección en el hospital
A veces antibióticos
Vacunación
Para reducir el contagio de la infección en los pabellones de cuidados especiales neonatales como las unidades de cuidados intensivos neonatales (UCIN), los miembros del personal del hospital se aseguran de que haya suficiente espacio entre los recién nacidos que están en incubadoras o en calentadores radiantes. También tienen cuidado de limpiar, desinfectar o esterilizar meticulosamente el equipo y usar catéteres intravenosos y respiradores durante el menor tiempo posible.
El personal hospitalario, los progenitores y los cuidadores pueden contribuir a evitar la propagación de estas infecciones hospitalarias lavándose siempre minuciosamente las manos con agua y jabón o con un desinfectante antibacteriano para manos.
Mientras están en el hospital, los recién nacidos son monitoreados cuidadosamente para detectar cualquier signo de infección.
Si los médicos determinan que una infección se está propagando a través del pabellón neonatal del hospital, pueden administrar ciertos antibióticos a los recién nacidos que aún no están infectados. Esta medida preventiva se denomina profilaxis.
El personal del hospital administra las vacunas siguiendo un calendario habitual a cualquier bebé que esté hospitalizado en ese momento. Algunas vacunas no se administran hasta el momento del alta.