Este tipo de gammagrafía utiliza la radiación liberada por los radionúclidos (llamada desintegración nuclear) para producir imágenes. Un radionúclido es un isótopo inestable que se convierte en más estable por la liberación de energía como radiación. Esta radiación puede incluir fotones de rayos gamma o emisión de partículas (como positrones, utilizados en tomografía por emisión de positrones [PET]).
La radiación producida por los radionúclidos puede utilizarse para la formación de imágenes o para el tratamiento de ciertos trastornos (p. ej., trastornos tiroideos).
Un radionúclido, en general tecnecio-99 m, se combina con diferentes compuestos metabólicamente activos y estables para formar un radiofármaco que se localiza en una estructura anatómica o enferma particular (tejido de destino). El radiofármaco se administra por vía oral o por inyección. Después de que el radionúclido ha tenido tiempo para llegar al tejido por investigar, se toman imágenes con una cámara gamma. Los rayos gamma emitidos por el radionúclido interactúan con los cristales de centelleo de la cámara y crean fotones luminosos que se convierten en señales eléctricas por los tubos fotomultiplicadores. Un ordenador resume y analiza las señales y las integra en imágenes bidimensionales. Sin embargo, pueden analizarse con exactitud sólo las señales cercanas al frente de la cámara; por lo tanto, las imágenes están limitadas por el espesor del tejido y el rango de la cámara.
Existen cámaras gamma portátiles que proveen imágenes de radionúclidos a la cabecera del paciente.
En general, la gammagrafía con radionúclidos se considera seguro; utiliza una dosis relativamente baja de radiación y ofrece información valiosa (p. ej., permite a los profesionales tomar imágenes de todo el esqueleto cuando sospechan que el cáncer ha hecho metástasis ósea.)
Imagen cortesía de Hakan Ilaslan, MD.
Usos de la gammagrafía con radionúclidos
El compuesto marcado con el radionúclido depende del órgano por estudiar o la indicación:
Para las imágenes del esqueleto, el tecnecio-99 m se combina con difosfonato y se utiliza para buscar metástasis o infección en hueso.
Para identificar inflamación, los leucocitos se marcan y son los que se utilizan para identificar el foco de inflamación.
Para localizar sangrado gastrointestinal, los glóbulos rojos se etiquetan para determinar si se han extravasado de los vasos sanguíneos.
Para las imágenes del hígado, el bazo o la médula ósea, se marca coloide azufrado.
Para las imágenes del tracto biliar, se marcan derivados del ácido iminodiacético y se utilizan para verificar obstrucción biliar, fuga de bilis y trastornos de la vesícula biliar.
La gammagrafía con radionúclidos se utiliza también para obtener imágenes de la glándula tiroides y de los sistemas cerebrovasculares, cardiovasculares, respiratorios y genitourinarios. Por ejemplo, en las imágenes de perfusión miocárdica, el tejido cardíaco capta los radionúclidos (p. ej., talio) en proporción a la perfusión. Esta técnica puede combinarse con pruebas de esfuerzo.
La técnica se utiliza también para evaluar tumores.
Variaciones de la gammagrafía con radionúclidos
TC por emisión de fotón único (SPECT)
La SPECT (del inglés, single-photon emission CT) utiliza una cámara gamma que gira alrededor del paciente. La serie de imágenes resultante se reconstruye por un ordenador en cortes tomográficos bidimensionales de una manera similar a la que se realiza en la TC convencional. Las imágenes bidimensionales pueden utilizarse para la reconstrucción tomográfica a fin de producir imágenes tridimensionales.
Desventajas de la gammagrafía con radionúclidos
La exposición a la radiación depende de los radionúclidos y la dosis utilizada. Las dosis eficaces tienden a variar desde 1,5 hasta 17 mSv, como en los siguientes casos (véase American College of Radiology(ACR): Radiation Dose to Adults From Common Imaging Examinations):
Para gammagrafías de pulmón: alrededor de 2 mSv
Para gammagrafías óseas y hepatobiliares: alrededor de 3 a 6 mSv
Para gammagrafías cardíacas con tecnecio sestimibi: alrededor de 9-12 mSv
Las reacciones a los radionúclidos son raras.
El área de la que es posible obtener imágenes con exactitud es limitada porque sólo las señales próximas al frente de la cámara gamma pueden localizarse con precisión. El detalle de la imagen también puede ser limitado.
A menudo los estudios por la imagen deben diferirse varias horas para darle tiempo al radionúclido a que alcance su objetivo.