La carencia de cobre es poco habitual en personas sanas y ocurre con mayor frecuencia en los lactantes que sufren otros problemas de salud o heredan una anomalía genética.
(Véase también Introducción a los minerales.)
La mayor parte del cobre del organismo está localizada en el hígado, en los huesos y en los músculos, pero existen trazas de cobre en todos los tejidos del organismo. El hígado excreta el exceso de cobre en la bilis para su eliminación del organismo. El cobre forma parte de muchas enzimas, incluidas las que son necesarias para las siguientes funciones:
Producción de energía
Formación de glóbulos rojos, de huesos o de tejido conjuntivo (el que une tejidos y órganos)
Acción antioxidante (protege a las células del daño producido por los radicales libres, que son subproductos de la actividad celular normal)
La deficiencia de cobre puede ser adquirida o heredada. Es poco frecuente en personas sanas y ocurre con mayor frecuencia entre los lactantes que
Son prematuros
Se están recuperando de desnutrición grave
Sufren diarrea persistente
Algunos niños de sexo masculino heredan una anomalía genética que causa carencia de cobre. Este trastorno se denomina síndrome de Menkes.
En los adultos, la carencia de cobre puede estar causada por
Trastornos que alteran la absorción de nutrientes (trastornos de malabsorción, como la enfermedad celiaquía, la enfermedad de Crohn, la fibrosis quística o el esprúe tropical)
Cirugía para la pérdida de peso (cirugía bariátrica)
Consumir demasiado cinc, que limita la absorción de cobre
Síntomas de la deficiencia de cobre
Los síntomas de la carencia de cobre consisten en fatiga y debilidad debidas a una disminución en el número de glóbulos rojos (anemia) y, a veces, un mayor riesgo de infecciones debido a una disminución del número de glóbulos blancos. A veces se desarrolla osteoporosis o daño nervioso. El daño neurológico puede causar hormigueo y pérdida de sensibilidad en los pies y las manos. Suele haber debilidad muscular. En ocasiones, existe confusión, irritabilidad y depresión leve. La coordinación se ve alterada.
El síndrome de Menkes, un trastorno genético, provoca discapacidad intelectual grave, vómitos y diarrea. La piel carece de pigmento y el pelo es escaso, duro y rizado. Los huesos pueden estar debilitados y mal formados, y las arterias son frágiles y a veces se rompen.
Diagnóstico de carencia de cobre
Análisis de sangre
El diagnóstico de carencia de cobre se suele basar en los síntomas y en análisis de sangre que permiten detectar concentraciones bajas de cobre y de ceruloplasmina (una proteína que transporta el cobre a través del torrente sanguíneo).
Cuanto más pronto se realice el diagnóstico de carencia de cobre y se indique el tratamiento, mejores son los resultados.
Tratamiento de la carencia de cobre
Tratamiento de la causa
Suplemento de cobre o inyección
Se trata la causa de la carencia de cobre y se administra un suplemento de cobre por vía oral. La carencia grave se puede tratar con cobre administrado por vía intravenosa.
Si el síndrome de Menkes lo presentan los bebés, el cobre se inyecta debajo de la piel (vía subcutánea). A pesar del tratamiento, los niños con síndrome de Menkes suelen morir antes de cumplir los 10 años.