La miocardiopatía dilatada comprende un grupo de alteraciones del músculo cardíaco en las que los ventrículos (las 2 cavidades inferiores del corazón) aumentan de tamaño (se dilatan) pero no son capaces de bombear la cantidad de sangre suficiente para atender a las necesidades del organismo, lo que origina insuficiencia cardíaca.
Las infecciones víricas, trastornos genéticos, y algunos trastornos hormonales son causas frecuentes de miocardiopatía dilatada, pero a menudo la causa es desconocida.
Con frecuencia los primeros síntomas son dificultad respiratoria (disnea) y fatiga.
Para diagnosticar una miocardiopatía dilatada se utilizan la electrocardiografía (ECG), la ecocardiografía, la resonancia magnética nuclear (RMN).
Generalmente se intenta tratar la causa de esta miocardiopatía mediante la administración de medicamentos.
El término miocardiopatía se refiere al deterioro progresivo de la estructura y la función de las paredes musculares de las cavidades del corazón. Hay 3 tipos principales de miocardiopatía. Además de la miocardiopatía dilatada, existe la miocardiopatía hipertrófica y la miocardiopatía restrictiva (véase también Introducción a la miocardiopatía).
El término miocardiopatía se utiliza sólo cuando un trastorno afecta directamente el músculo cardíaco (miocardio). Otros trastornos cardíacos, como las arteriopatías coronarias y las valvulopatías coronarias, también pueden acabar provocando la dilatación de los ventrículos, lo que da lugar a insuficiencia cardíaca.
La miocardiopatía dilatada puede aparecer a cualquier edad, pero es más común en adultos menores de 50 años. Aproximadamente un 10% de las personas con miocardiopatía dilatada tienen más de 65 años de edad. En Estados Unidos, el trastorno afecta con mayor frecuencia a varones que a mujeres, así como a personas de ascendencia africana en comparación con las personas de ascendencia caucásica. Alrededor de 7 de cada 100 000 personas desarrollan miocardiopatía dilatada cada año.
Causas de la miocardiopatía dilatada
Las causas más frecuentes de miocardiopatía dilatada son
Infecciones víricas
Trastornos genéticos (los factores genéticos desempeñan un papel en el 20 al 35% de los casos)
Algunas infecciones víricas pueden causar una inflamación aguda del músculo cardíaco (miocarditis). Cuando la inflamación daña la capacidad de bombeo del corazón, el trastorno se denomina miocardiopatía vírica. En Estados Unidos, la infección por virus Coxsackie B es la causa más común de miocardiopatía vírica. Una infección por VIH también puede causar miocardiopatía. En otras partes del mundo, otras infecciones víricas son causas más habituales. A veces, la miocardiopatía dilatada es consecuencia de una infección bacteriana, como la enfermedad de Chagas.
El virus o la bacteria infecta y a menudo debilita el músculo cardíaco. Como resultado, el corazón no puede bombear con fuerza. El músculo cardíaco dañado es reemplazado por tejido fibroso (cicatricial). Seguidamente, el músculo cardíaco se estira, dando lugar a la ampliación de las cavidades cardíacas y la reducción de la capacidad de bombeo. Después de lo anterior aparece la insuficiencia cardíaca.
Otras causas de miocardiopatía dilatada son
Ciertos trastornos hormonales crónicos, como la diabetes mellitus de larga duración y mal controlada o el trastorno tiroideo mal controlado
Grave obesidad
Frecuencia cardíaca rápida (persistente)
Consumo de alcohol (cuando se toma en grandes cantidades y también existe desnutrición), cocaína, algunos antidepresivos, algunos antipsicóticos y unos pocos fármacos antineoplásicos (quimioterápicos)
En muchos casos no se puede identificar una causa definida de la miocardiopatía dilatada, en cuyo caso se denomina miocardiopatía dilatada idiopática.
Las causas muy poco frecuentes de las miocardiopatías dilatadas son el embarazo (miocardiopatía periparto), la sobrecarga de hierro, la sarcoidosis, y los trastornos reumáticos sistémicos como la artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico (lupus) y esclerosis sistémica. El estrés extremo también puede causar a veces un tipo de miocardiopatía dilatada llamada miocardiopatía de Takotsubo, miocardiopatía por estrés o síndrome del corazón roto.
Síntomas de la miocardiopatía dilatada
Por lo general, los primeros síntomas de la miocardiopatía dilatada son dificultad para respirar (disnea) durante el esfuerzo físico y cansancio fácil. Estos síntomas se deben a un debilitamiento en la función de bombeo del corazón (insuficiencia cardíaca). Algunas personas presentan dolor torácico.
Cuando la causa de la miocardiopatía es una infección, los primeros síntomas pueden ser fiebre repentina y síntomas similares a los de la gripe.
Complicaciones
La insuficiencia cardíaca puede aparecer cuando el daño cardíaco es grave, independientemente de la causa de la miocardiopatía dilatada. La insuficiencia cardíaca da lugar a retención de líquidos en las piernas y el abdomen (causando hinchazón) y los pulmones se llenan de líquido (causando dificultad para respirar con la actividad física y mientras se está acostado). Cuando la insuficiencia cardíaca es grave, la presión arterial puede ser baja debido a la debilidad del corazón.
Pueden aparecer valvulopatías coronarias. Como consecuencia de la dilatación (el agrandamiento) del corazón, las válvulas cardíacas pueden ser incapaces de cerrar con normalidad y a menudo permiten que la sangre se filtre de nuevo en la cavidad cardíaca en lugar de fluir hacia el siguiente vaso sanguíneo o cavidad (lo que se denomina regurgitación). Las válvulas afectadas con mayor frecuencia son la válvula mitral, situada entre la aurícula izquierda (cavidad superior del corazón) y el ventrículo izquierdo (cavidad inferior del corazón), y la válvula tricúspide, situada entre la aurícula derecha y el ventrículo derecho. Estas fugas de sangre producen soplos cardíacos, que pueden escucharse con un fonendoscopio.
Los ritmos cardíacos anormales (arritmias) pueden consecuencia de un daño y un estiramiento del músculo cardíaco. Las arritmias pueden causar sensación de latidos irregulares (palpitaciones), dificultad respiratoria o muerte súbita. El escape de las válvulas y las arritmias cardíacas pueden interferir aún más en la acción de bombeo del corazón.
Se pueden formar coágulos de sangre en las paredes de las cavidades cardíacas porque la sangre puede agruparse en el corazón hipertrofiado, en especial cuando los ventrículos están muy dilatados y se contraen mal. Los coágulos pueden fragmentarse (se convierten en émbolos), viajar desde el corazón hacia los vasos sanguíneos de cualquier sitio del organismo y obstruirlos, causando daño en el órgano que irrigan. Si el aporte de sangre al cerebro está bloqueado, puede producirse un accidente cerebrovascular (ictus).
Diagnóstico de miocardiopatía dilatada
Pruebas de diagnóstico por la imagen, como ecocardiografía o resonancia magnética nuclear (RMN) del corazón
A veces, una biopsia del músculo cardíaco (miocardio)
En algunas ocasiones, pruebas para detectar la causa y/o complicaciones
El diagnóstico de la miocardiopatía dilatada se basa en los síntomas de la persona afectada, los resultados de la exploración física y pruebas adicionales. Los médicos buscan otras causas de un corazón dilatado, como un infarto de miocardio previo, presión arterial elevada (hipertensión) crónica o una válvula cardíaca dañada.
Los análisis de sangre para los virus comunes que pueden causar la miocardiopatía dilatada se realizan cuando el médico sospecha la infección como causa.
En la electrocardiografía (ECG) se detectan anomalías de la actividad eléctrica del corazón. Sin embargo, estas anomalías no constituyen generalmente una prueba suficiente para establecer un diagnóstico.
Ya que los trastornos genéticos pueden causar miocardiopatía dilatada, los miembros de la familia también pueden someterse a pruebas.
Obtención de pruebas de imagen cardíacas
El ecocardiograma, que emplea ondas de ultrasonidos para producir una imagen del corazón, es el procedimiento más útil porque puede mostrar tanto el tamaño del corazón como su acción de bombeo.
Para confirmar el diagnóstico (y a veces para identificar la causa) suele utilizarse la resonancia magnética nuclear (RMN) del corazón, que ofrece imágenes muy detalladas.
Biopsia y cateterismo cardíaco
Si el diagnóstico continúa siendo dudoso, puede obtenerse información adicional sobre la capacidad de bombeo del corazón mediante un cateterismo cardíaco, un procedimiento invasivo que consiste en enhebrar un catéter en un vaso sanguíneo del brazo, el cuello o la pierna hasta el corazón. Durante el cateterismo cardíaco, el médico también puede llevar a cabo una biopsia (la extracción de una muestra de tejido para su examen al microscopio), medir las presiones dentro de las cavidades cardíacas y descartar la presencia de una arteriopatía coronaria.
Tratamiento de la miocardiopatía dilatada
Medicamentos
A veces, el tratamiento con dispositivos, como un desfibrilador y/o un marcapasos
Si es posible, el médico trata el trastorno que origina la miocardiopatía dilatada. Por ejemplo, se pueden utilizar medicamentos que deprimen el sistema inmunitario (inmunodepresores), como los corticoesteroides, para tratar un trastorno reumático sistémico que ha causado una miocardiopatía dilatada.
Las medidas generales de tratamiento incluyen evitar el estrés, limitar la sal en la dieta y tener periodos de descanso, que contribuyen a reducir la exigencia sobre el corazón, en especial cuando la miocardiopatía es aguda o grave.
Fármacos para la miocardiopatía dilatada
Los fármacos para la insuficiencia cardíaca, como los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA), los antagonistas de los receptores de la angiotensina II (ARA-II), los betabloqueantes, una combinación de bloqueante del receptor de la angiotensina II y los inhibidores de la neprilisina, los antagonistas de la aldosterona (espironolactona o eplerenona), los inhibidores de la proteína cotransportadora-2 de glucosa y sodio (SGLT), la combinación de hidralazina y nitratos y la ivabradina mejoran la función de bombeo del corazón, prolongan la vida y ayudan a atenuar los síntomas persistentes.
Los diuréticos (fármacos que aumentan la micción) se utilizan para reducir el exceso de líquido en los pulmones y disminuir los síntomas de hinchazón por retención de líquido, pero no prolongan la vida.
La digoxina puede ayudar al corazón a bombear y disminuir el número de hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca, pero no prolonga la vida.
Para tratar los ritmos anormales del corazón se administran fármacos antiarrítmicos. La mayoría de estos fármacos se prescriben inicialmente en bajas dosis. Estas dosis se aumentan progresivamente en pequeños incrementos, porque si la dosis del antiarrítmico es demasiado alta puede empeorar las alteraciones del ritmo cardíaco o deprimir la función de bombeo.
Se pueden usar medicamentos para prevenir coágulos de sangre, como warfarina o aspirina, particularmente cuando los ventrículos están muy dilatados y se contraen mal.
Se necesitan precauciones especiales cuando se administran medicamentos a mujeres con miocardiopatía periparto porque algunos de los medicamentos que se usan generalmente para tratar la miocardiopatía pueden absorberse en la leche materna y dañar al lactante.
Tratamiento con dispositivos
A las personas que presentan una anomalía de la conducción eléctrica cardíaca les puede resultar beneficiosa la implantación de un marcapasos, un dispositivo que permite estimular primero las aurículas y después los ventrículos (terapia de resincronización cardíaca) para ayudar a normalizar dicha conducción. Cuando se utiliza en la persona adecuada, este dispositivo (marcapasos) puede ayudar a la vuelta a la normalidad del patrón de contracción del corazón y a mejorar la funcionalidad cardíaca.
Los médicos también consideran la posibilidad de instalar un desfibrilador cardioversor implantable en los pacientes con disfunción persistente del corazón y alto riesgo de arritmias que dan lugar a muerte súbita.
Trasplante cardíaco
La insuficiencia cardíaca en la miocardiopatía dilatada puede ser progresiva y, en última instancia, mortal. Debido a su mal pronóstico, la miocardiopatía dilatada es la causa principal de trasplante cardíaco o de soporte mecánico cardíaco mediante un dispositivo de asistencia ventricular izquierda. Un trasplante cardíaco exitoso cura la afección, aunque tiene sus propias complicaciones y limitaciones.
Pronóstico de la miocardiopatía dilatada
El pronóstico de la miocardiopatía dilatada varía considerablemente dependiendo de muchos factores. En general, el pronóstico empeora a medida que el corazón se va dilatando más y su funcionamiento se deteriora. Los ritmos cardíacos anormales también indican un mal pronóstico. En general, el pronóstico es mejor para las mujeres que para los hombres, y las personas de ascendencia africana sobreviven la mitad del tiempo que las personas de ascendencia caucásica.
Alrededor del 40 al 50% de las muertes son súbitas, probablemente como resultado de un ritmo cardíaco anormal o de un coágulo de sangre que bloquea el flujo sanguíneo en un área importante. Otros factores adicionales que influyen en el riesgo de muerte son la causa y la gravedad de la miocardiopatía, la edad de la persona y la capacidad para seguir los consejos médicos (que incluyen la toma de medicamentos según las indicaciones, el mantenimiento de una dieta baja en sal y la asistencia médica a citas de seguimiento programadas), y si la persona tiene acceso a un tratamiento especializado. Sin embargo, el pronóstico en general ha mejorado con la introducción de los desfibriladores automáticos implantables, la terapia de resincronización cardíaca y otras intervenciones.
Más información
El siguiente recurso en inglés puede ser útil. Tenga en cuenta que el MANUAL no se hace responsable del contenido de este recurso.
American Heart Association: Dilated cardiomyopathy: proporciona información completa sobre los síntomas, el diagnóstico y el tratamiento de la miocardiopatía dilatada