Un bloqueo del nervio oftálmico anestesia la frente, el cuero cabelludo frontal y, a veces, el párpado superior homolaterales.
(Véase también Anestesia local para el tratamiento de laceraciones.)
Indicaciones
Laceración u otra lesión del cuero cabelludo frontal, la frente, la ceja o el párpado superior tratada en forma quirúrgicamente
El bloqueo nervioso tiene ventajas sobre la infiltración anestésica local cuando es importante la aproximación precisa de los bordes de la herida (p. ej., reparación de la piel facial), porque un bloqueo nervioso no distorsiona el tejido como lo hace la infiltración local.
Contraindicaciones
Contraindicaciones absolutas
Antecedentes de alergia al agente anestésico o al vehículo de administración (elegir un anestésico diferente)
Ausencia de puntos de referencia anatómicos necesarios para guiar la inserción de la aguja (p. ej., debido a un traumatismo)
Contraindicaciones relativas
Infección en el trayecto de inserción de la aguja: sedación durante el procedimiento u otra anestesia.
Coagulopatía*: cuando sea posible, corregir antes del procedimiento, o utilizar un método diferente de analgesia.
*La anticoagulación terapéutica (p. ej., para la embolia pulmonar) aumenta el riesgo de hemorragia durante los bloqueos nerviosos, pero esto debe analizarse frente al aumento del riesgo de trombosis (p. ej., accidente cerebrovascular) si se revierte la anticoagulación. Se debe analizar cualquier reversión contemplada con el médico que maneja la anticoagulación del paciente y luego con el paciente.
Complicaciones
Reacción adversa al anestésico o al vehículo de administración (p. ej., reacción alérgica al anestésico [raro] o al metilparabeno [un conservante])
Toxicidad debido a sobredosis de anestésicos (p. ej., convulsiones, arritmias cardíacas) o efectos simpaticomiméticos debido a la adrenalina (si se usa una mezcla de anestésico con adrenalina)
Inyección intravascular de anestésico o adrenalina
Hematoma
Neuritis
Diseminación de la infección, al pasar la aguja a través de un área infectada
La mayoría de las complicaciones son el resultado de una posición incorrecta de la aguja.
Equipo
Guantes no estériles
Precauciones de barrera según esté indicado (p. ej., barbijo, gafas de seguridad o máscara facial, gorra y bata)
Solución antiséptica (p. ej., clorhexidina, povidona yodada, alcohol)
Anestésico local inyectable* como lidocaína al 2% con adrenalina† 1:100.000, o para anestesia de mayor duración, bupivacaína al 0,5% con adrenalina† 1:200.000
Jeringa (p. ej., 3 mL) y aguja (p. ej., calibre 25 o 27) para inyección de anestesia
* Los anestésicos locales se analizan en Laceraciones.
†Dosis máxima de anestésicos locales: lidocaína sin adrenalina, 5 mg/kg; lidocaína con adrenalina, 7 mg/kg; bupivacaína, 1,5 mg/kg. NOTA: una solución al 1% (de cualquier sustancia) representa 10 mg/mL (1 g/100 mL). La adrenalina causa vasoconstricción, lo que prolonga el efecto anestésico. Los pacientes con enfermedad cardíaca solo deben recibir cantidades limitadas de adrenalina (máximo 3,5 mL de solución que contiene adrenalina 1:100.000); en forma alternativa, se puede usar un anestésico local sin adrenalina.
Consideraciones adicionales
Se debe documentar cualquier déficit nervioso preexistente antes de realizar un bloqueo nervioso.
Se debe detener el procedimiento de bloqueo nervioso si no se puede confirmar la posición de la aguja o si el paciente no coopera. Considerar sedación para los pacientes que no pueden cooperar o permanecen inmóviles.
Anatomía relevante
El nervio oftálmico es el primer ramo del nervio trigémino.
El nervio oftálmico sale del cráneo a través del agujero supraorbitario, que se palpa en el reborde supraorbitario, justo encima de la pupila cuando el paciente mira en línea recta hacia adelante. El nervio oftálmico puede ramificarse dentro de la órbita antes de salir del cráneo para emitir el nervio supraorbitario y (en sentido más medial) el nervio supratroclear.
Varios ramos cutáneos del nervio oftálmico se diseminan sobre la frente.
Posicionamiento
Colocar al paciente inclinado o en decúbito supino.
Descripción paso a paso del procedimiento
Controlar la sensibilidad en la distribución del nervio oftálmico.
Usar guantes y precauciones de barrera apropiados.
Palpar el reborde supraorbitario e identificar la muesca supraorbitaria (el sitio para la inyección).
Limpiar el sitio de la piel con una solución antiséptica, con cuidado de mantenerla fuera de los ojos.
Crear un habón cutáneo de anestésico, si es que se usa uno, en la muesca supraorbitaria.
Insertar la aguja en mayor profundidad y desplazar con delicadeza en direcciones medial y ligeramente cefálica para provocar parestesias. No insertar la aguja en el agujero supraorbitario.
Cuando ocurre parestesia, retire la aguja entre 1 y 2 mm.
Aspirar para excluir la colocación intravascular de la aguja y luego inyectar con lentitud (es decir, durante 30 a 60 segundos) unos 3 mL de anestésico. Mientras se inyecta, aplicar presión (con el dedo o una gasa) debajo del borde supraorbitario para prevenir el edema del párpado superior.
Si no ocurren parestesias durante la inserción de la aguja, inyectar el anestésico sobre la escotadura supraorbitaria (identificada por palpación).
Se masajea el área durante unos 10 segundos, para acelerar el establecimiento de la anestesia.
Si estas inyecciones no tienen éxito, se debe insertar una vía para la administración de anestésico por vía subcutánea a lo largo del borde orbitario para bloquear los ramos del nervio oftálmico.
Espere unos 5 a 10 minutos para que el anestésico surta efecto.
Cuidados posteriores
Asegurar la hemostasia en el sitio de la inyección.
Indicarle al paciente el tiempo anticipado para la resolución de la anestesia.
Advertencias y errores comunes
Para minimizar el riesgo de rotura de la aguja, no doblarla en su eje, insertelarla en toda su profundidad (es decir, hasta el eje) ni intentar cambiar la dirección de la aguja mientras está insertada.
Para ayudar a prevenir la lesion nerviosa o la inyeccion intraneural, se les debe indicar a los pacientes que informen si sienten parestesias o dolor durante el procedimiento.
Para ayudar a prevenir las inyecciones intravasculares, aspirar antes de inyectar.
Recomendaciones y sugerencias
Minimizar el dolor de la inyección mediante aplicación lenta (p. ej., 30 a 60 segundos), mediante el calentamiento de la solución anestésica a la temperatura corporal y la amortiguación el anestésico.