En la canulación de una vena periférica, se introduce un catéter de plástico (cánula) en una vena periférica, en forma típica con un catéter sobre una aguja.
La canulación periférica de la vena es el método más común de obtención de un acceso vascular y puede ser realizado por muchos miembros del equipo de atención médica.
Guía ecográfica, cuando el equipo y el personal capacitado están disponibles, puede facilitar la canulación de la vena periférica, especialmente de venas profundas, no palpables.
(Véase también Cómo hacer una canulación venosa periférica — bajo guía ecográfica).
Indicaciones para la canulación de una vena periférica
Administración de líquidos y fármacos por vía intravenosa
Extracción repetida de sangre venosa
Contraindicaciones para la canulación de una vena periférica
Contraindicaciones absolutas
Ninguna
Contraindicaciones relativas
Uso planificado de líquidos IV muy concentrados o irritantes: utilice un catéter venoso central o infusión intraósea
Infección o quemaduras en la piel en un sitio propuesto para la canulación
Lesión o extremidad edematosa masiva
Vena trombótica o flebítica
Mastectomía homolateral o vaciamiento ganglionar
En las situaciones anteriores, utilice otro sitio (p. ej., el brazo opuesto).
Complicaciones de la canulación de una vena periférica
Las complicaciones son raras e incluyen
Infección local
Tromboflebitis venosa
Las complicaciones anteriores pueden reducirse utilizando una técnica estéril durante la inserción y reemplazando o retirando los catéteres dentro de las 72 horas.
Otras complicaciones incluyen
Extravasación de líquidos infundidos en los tejidos circundantes
Punción arterial
Hematoma o sangrado
Daño a la vena
Daño nervioso
Embolia del catéter
Equipo para canulación venosa periférica
Materiales para limpiar la piel: alcohol, clorhexidina o hisopos o toallitas con povidona yodada
Guantes no estériles
Torniquete, de un solo uso
Catéter IV, típicamente de calibre 18 o 20 para infusiones de rutina en adultos (calibre 14 o 16 para infusión de alto volumen) y calibre 22 o 24 en lactantes y niños pequeños
Equipo de infusión IV (p. ej., bolsa de solución IV, percha, tubuladura) o solución fisiológica
Materiales de vendajes (p. ej., cinta adhesiva, gasas, tijeras, vendajes oclusivos transparentes)
El equipamiento opcional incluye
Dispositivo venoso (p. ej., visor infrarrojo, dispositivo ecográfico)
Anestésico local o tópico (estándar para niños): (p. ej., lidocaína al 1% inyectable sin adrenalina, inyector con gas de lidocaína sin aguja, una mezcla de lidocaína, adrenalina y gel de tetracaína, o crema de lidocaína/prilocaína)
Tabla de inmovilización y venda tubular si se coloca el catéter sobre una articulación
Consideraciones adicionales para la canulación de una vena periférica
Hipersensibilidad a la clorhexidina: limpiar la piel con un desinfectante diferente.
Hipersensibilidad al látex: usar guantes y torniquete sin látex.
Por lo general, no se necesita un campo estéril para la canulación venosa periférica. Sin embargo, debe seguirse la técnica estéril (es decir, aséptica o aséptica sin contacto).
Los catéteres periféricos IV no deben cubrir una articulación (p. ej., la fosa antecubital) a menos que otros sitios no estén disponibles; el movimiento articular podría provocar la torsión del catéter y también es incómodo. Si se debe utilizar un sitio de este tipo, una tabla de inmovilización puede ayudar a evitar que la articulación se flexione.
Anatomía relevante para la canulación de una vena periférica
Las venas periféricas se canulan más fácilmente en un segmento recto proximal a la unión de 2 afluentes.
Un segmento venoso tortuoso puede ser difícil de canular, y las válvulas venosas también pueden impedir la inserción del catéter.
En general, primero se canulan las venas más distales; se utilizan sitios más proximales a medida que se ocupan los sitios distales.
Los sitios de canulación de los miembros superiores son los más duraderos y convenientes y tienen menos probabilidades de experimentar complicaciones como tromboflebitis. Por lo tanto, solo utilice las venas de los miembros inferiores o las venas yugulares externas si no se dispone de venas adecuadas en los miembros superiores.
Posicionamiento para la canulación de una vena periférica
Apoye la parte del cuerpo que se está canulando sobre una superficie cómoda y ajuste la posición para exponer de manera óptima el sitio.
Para la vena yugular externa, coloque al paciente en posición de Trendelenburg con la cabeza ligeramente inclinada en dirección contralateral.
Descripción paso a paso de la canulación de una vena periférica
Identificar y preparar el sitio
Haga una inspección preliminar (no estéril) para identificar una vena adecuada: aplique un torniquete, índiquele al paciente que cierre el puño y palpe con el dedo índice para localizar una vena de gran diámetro que no sea móvil y tenga buena turgencia.
Para ayudar a dilatar y localizar las venas, toque un sitio potencial con la punta de los dedos. Puede ser útil permitir que el brazo cuelgue hacia abajo, lo que aumenta la presión venosa y/o aplicar una compresa caliente. Usar un dispositivo para buscar venas si no se ve o palpa fácilmente una vena adecuada.
Después de identificar un sitio de canulación adecuado, retirar el torniquete.
Aplique anestésico tópico si se está utilizando, y espere el tiempo suficiente para que surta efecto (p. ej., 1 a 2 minutos para el inyector de gas, 30 minutos para el tópico).
Preparar el equipo para la infusión IV o el catéter para infundir la solución fisiológica.
Usar guantes.
Limpie el sitio de la piel con solución antiséptica, comenzando en el sitio de inserción de la aguja y haciendo varios círculos hacia afuera.
Permitir que la solución antiséptica se seque por completo.
Inserte el catéter venoso periférico
Prueba del angiocatéter: sostenga el centro de la cánula y gire ligeramente la cánula en torno de la aguja para asegurar que se mueva suavemente. No deslice la aguja dentro y fuera de la cánula.
Vuelva a aplicar el torniquete.
Mantenga la zona estable con la mano no dominante y use el pulgar para aplicar tracción suave sobre la vena distal al sitio de inserción de la aguja para evitar que se mueva. Puede no ser necesaria la tracción de las venas más grandes en el antebrazo o la fosa antecubital.
Sostenga el angiocatéter entre el pulgar y el dedo índice de su mano dominante con el bisel de la aguja hacia arriba.
Dígale al paciente que el pinchazo está a punto de suceder.
Inserte la aguja en la piel en un ángulo poco profundo (10 a 30 grados) de 1 a 2 cm distal al punto en el que desea ingresar en la vena.
Se avanza el angiocatéter en la vena con un movimiento lento y uniforme. Cuando la punta de la aguja entra en la luz, la sangre aparece en la cámara del angiocatéter (una gota de sangre, conocida como flash), y se puede sentir un chasquido cuando la aguja atraviesa la pared de la vena. Deje de avanzar el angiocatéter.
Si no aparece una gota de sangre después de 1 a 2 cm de inserción, retire lentamente el angiocatéter. Si inicialmente había pasado completamente a través de la vena, ahora puede aparecer una gota de sangreo a medida que retira la punta de la aguja hacia la luz. Si aún no aparece una gota de sangre, retire el angiocatéter casi hasta la superficie de la piel, cambie de dirección e intente nuevamente avanzar en la vena.
Si se produce edema local rápido, la sangre o el líquido se extravasan. Termine el procedimiento: retire el torniquete y el angiocatéter, y aplique presión en el sitio de punción con una gasa (un minuto o 2 suele ser adecuado a menos que el paciente tenga una coagulopatía). Se debe elegir un sitio diferente en todos los intentos posteriores.
Avance el catéter en la vena
Con la punta de la aguja inmóvil dentro de la luz, baje con cuidado el angiocatéter para alinearlo mejor con la vena y avance 1 a 2 mm más, con el fin de asegurar que la punta del catéter de plástico también ha ingresado en la vena. Este paso se realiza porque la punta de la aguja precede ligeramente a la punta del catéter.
Mantenga la aguja firme y deslice toda la longitud del catéter de plástico sobre la aguja y dentro de la vena. El catéter debe deslizarse fácilmente y sin dolor. Retirar la aguja.
Si se produce resistencia o dolor, asumir que el catéter no está en la vena. En la mayoría de los casos, tendrá que detener el intento y comenzar de nuevo en un nuevo sitio. Sosteniendo el centro del catéter inmóvil, retire la aguja y luegoextraiga el catéter en forma lenta y gradual mientras observa la punta del catéter. Si la sangre fluye desde el centro, deje de retirar el catéter e intente avanzar de nuevo. Si no aparece sangre, continuar retirando lentamente el catéter. Cuando se haya retirado el catéter, aplique un vendaje sobre la zona con una presión suave.
En ocasiones, el catéter se encuentra en la luz de la vena, pero no puede avanzar porque choca con una válvula o con un giro brusco en la vena. Para ayudar al catéter a pasar a través de una válvula, haga avanzar el catéter mientras lo enjuaga con líquido de una jeringa o de la tubuladura IV. Para facilitar la inserción del catéter en una vena tortuosa, aplique manualmente tracción suave distal a la vena para rectificarla, y luego intente avanzar el catéter.
Una vez que el catéter se coloca con éxito, extraiga toda la sangre necesaria para las pruebas de laboratorio, retire el torniquete, coloque un poco de gasa debajo de la punta, aplique presión con el pulpejo del dedo sobre la piel proximal a la punta del catéter (para comprimir la vena y limitar la pérdida de sangre a través de la punta del catéter), y conecte la infusión IV o la tubuladura de la solución fisiológica.
Comenzar la infusión IV/establecer el bloqueo salino
Se conecta el extremo de la tubuladura IV o de la solución fisiológica con el centro del catéter.
Comenzar la infusión o inyectar un bolo de solución fisiológica en la vía (inyectar alrededor de 5 mL de solución fisiológica en pulsos pequeños y rápidos). El líquido debe fluir libremente.
Si el líquido se extravasa o no fluye libremente, retire el catéter, aplique un vendaje sobre la zona para aplicar compresión suave e inserte un nuevo catéter en otro sitio.
Vendar el sitio
Limpiar toda la sangre y el líquido del sitio, con cuidado de no dañarr el catéter.
Cubra el catéter con un vendaje oclusivo transparente.
Enrolle la tubuladura IV (o la tubuladura que infunde la solución fisiológica) y péguelo con cinta adhesiva a la piel lejos del sitio de inserción IV, para ayudar a evitar que la tracción accidental del tubo extriga el catéter.
Anote la fecha y la hora de la canulación IV en el vendaje.
Aplicar una tabla de inmovilización según sea necesario.
Cuidados posteriores a la canulación de una vena periférica
Reemplazar o retirar los catéteres dentro de las 72 horas de la colocación.
Advertencias y errores comunes para la canulación de una vena periférica
Solo aplique compresión leve en el torniquete; ya que es un torniquete venoso, no arterial.
Si no se introduce la vena, no intente reposicionar la aguja moviendo la punta hacia un lado u otro; esto puede empujar la vena fuera del camino y también dañar el tejido. En cambio, retire la aguja casi hasta la superficie de la piel antes de cambiar el ángulo y la dirección de la inserción.
Nunca retire el catéter sobre la aguja ni vuelva a insertar la aguja en el catéter. Hacerlo podría dañar la punta del catéter dentro del paciente.
Si el líquido no fluye libremente, no continúe con los intentos de infusión; esto puede causar extravasación y formación de hematomas.
Recomendaciones y sugerencias para la canulación de una vena periférica
La pomada de nitroglicerina o las compresas calientes pueden ayudar a dilatar las venas.
Considere la posibilidad de utilizar torniquetes dobles (se coloca un segundo torniquete distal al sitio de inserción anticipado del catéter después de la aplicación del primer torniquete) para ingurgitar las venas en pacientes de contextura corporal grande o miembros edematosos.