Las enfermedades por cristales de fosfato básico de calcio (apatita) y oxalato de calcio tienden a causar manifestaciones clínicas similares a las de otras artritis inducidas por cristales. (Véase también Generalidades sobre la artritis inducida por cristales.)
Enfermedad por depósito de cristales de fosfato básico de calcio
La mayoría de las calcificaciones patológicas en el cuerpo contienen mezclas de hidroxiapatita sustituida por carbonato y fosfato octacálcico. Dado que estos cristales ultramicroscópicos son fosfatos de calcio no acídicos, el término fosfato básico de calcio es más preciso que el de apatita. Estos cristales ultramicroscópicos se encuentran en grupos en forma de copos de nieve en afecciones reumáticas (p. ej., tendinitis calcificada, periartritis calcificada, algunos casos de esclerosis sistémica progresiva y dermatomiositis). Se encuentran también en el líquido articular y en cartílagos en pacientes con artropatías degenerativas avanzadas que producen estrechez del espacio articular visible en radiografía.
Los cristales de fosfato básico de Ca pueden destruir la articulación y causar inflamación intraarticular o periarticular grave.
Un ejemplo de esto es el síndrome del hombro/rodilla de Milwaukee, una artropatía destructiva crónica que afecta sobre todo a mujeres mayores en el hombro y a veces en la rodilla. El síndrome se caracteriza por derrames sinoviales crónicos grandes pero mínimamente inflamatorios.
Una podagra aguda por depósito de fosfato básico de calcio puede simular gota; se presenta como un síndrome aislado en mujeres jóvenes (con menor frecuencia, en hombres jóvenes) y se trata igual que la gota aguda. La calcificación periarticular esponjosa o densa presente en las radiografías que confirma el diagnóstico durante una crisis aguda puede resolverse en forma espontánea en semanas o meses.
Además del análisis del líquido sinovial, debe hacerse radiografía de articulaciones sintomáticas. Los cristales de fosfato básico de Ca se ven en la radiografía como opacidades periarticulares en forma de nubes; los cristales suelen desaparecer en forma espontánea en algunos meses o en ocasiones en algunos días. No siempre es posible la detección de cristales de fosfato básico de Ca en el líquido sinovial. Los cristales agrupados suelen poder identificarse solo tinciones especiales para calcio o con microscopio electrónico de transmisión. Los grupos no son birrefringentes en luz polarizada.
Resulta útil el tratamiento de la enfermedad por depósito de cristales de fosfato básico de calcio con colchicina oral, medicamentos antiinflamatorios no esteroideos o, en caso de afección de una articulación grande, inyección intraarticular de suspensión cristalina de ésteres de corticosteroides. El tratamiento es similar al de la gota aguda.
Enfermedad por depósito de cristales de oxalato de calcio
Los deposítos de oxalato de calcio son extremadamente inusuales. Pueden ocurrir en pacientes con hiperazoemia que reciben hemodiálisis o diálisis peritoneal, en particular pacientes tratados con ácido ascórbico (vitamina C), que se metaboliza a oxalato. Sin embargo, los avances en los líquidos que se utilizan para el intercambio durante la diálisis casi han logrado la desaparición de esta enfermedad.
Pueden depositarse cristales en las paredes de los vasos sanguíneos y en la piel, y también en las articulaciones. Los cristales se ven como estructuras bipiramidales birrefringentes positivas o indeterminadas. El líquido sinovial puede tener > 2.000 leucocitos/mcL. En la radiografía, los cristales de oxalato de calcio son indistinguibles de las calcificaciones periarticulares de fosfato básico de calcio o de los depósitos de cristales de pirofosfato de calcio dihidratado en el cartílago.
El tratamiento de la enfermedad por depósito de cristales de oxalato de calcio es el mismo que para la artritis por pirofosfato de calcio (enfermedad por depósito de cristales de pirofosfato de calcio).