- Introducción a las mordeduras y picaduras
- Mordeduras humanas
- Mordeduras de animales
- Mordedura de caimán (aligátor), otros cocodrilos e iguanas
- Mordedura de lagarto
- Mordeduras de serpiente
- Picaduras por ciempiés y milpiés
- Picaduras de abejas, avispas, avispones y hormigas
- Picaduras de insectos
- Picadura de la oruga de la polilla de franela o polilla gato
- Picaduras de ácaros
- Picaduras de escorpión
- Picadura de araña
- Picaduras de garrapatas
- Picaduras de medusas
- Picaduras de moluscos
- Picadura de erizo de mar
- Picaduras de raya
Solo se conocen dos lagartos venenosos
lagarto moteado
monstruo de Gila
El lagarto moteado se encuentra en México. El monstruo de Gila es se encuentra en Arizona, Sonora, México y las áreas adyacentes.
El veneno de estos lagartos es bastante similar en contenido y efecto al de algunas serpientes venenosas, aun cuando los síntomas tienden a ser mucho menos graves y la mordedura casi nunca resulta mortal. A diferencia de la mayor parte de las serpientes, el monstruo de Gila y el lagarto moteado atenazan firmemente cuando muerden e introducen el veneno mordiendo a su víctima en vez de inyectarlo por los colmillos. Puede ser difícil desprenderse del lagarto.
Entre los síntomas comunes se encuentran dolor, hinchazón y alteraciones de la coloración de la zona que rodea la mordedura, así como inflamación de los ganglios linfáticos. La persona afectada puede quedar débil y sudar profusamente, tener sed, dolor de cabeza y zumbido de oídos (tinnitus o acúfeno). En los casos graves es posible que se produzca un descenso de la presión arterial.
Algunas sugerencias para desprender al monstruo de Gila son las siguientes:
Obligar a mantener las fauces abiertas con unos alicates
Aplicar una llama bajo la barbilla del lagarto
Sumergir al lagarto y la extremidad del cuerpo bajo el agua
Una vez desprendido el lagarto, a veces permanecen en la piel fragmentos de dientes que hay que retirar. El tratamiento de la presión arterial baja o de la coagulación es similar al de las mordeduras de serpientes venenosas. No existe un antídoto específico.
(Véase también Introducción a las mordeduras y picaduras.)