Muchos adolescentes tienen actividad sexual, pero es posible que no estén completamente informados sobre anticoncepción, embarazo e infecciones de transmisión sexual (ITS). La impulsividad, la falta de planificación y el consumo simultáneo de sustancias y alcohol disminuyen la probabilidad de que los adolescentes utilicen métodos anticonceptivos y de barrera para prevenir la transmisión de las ITS (Infecciones de Transmisión Sexual).
Contracepción en los adolescentes
Cualquiera de los métodos anticonceptivos utilizados por adultos puede ser utilizado por adolescentes. Los obstáculos más comunes son el acceso, el uso correcto y la adherencia (p. ej., olvidarse de tomar los anticonceptivos orales diarios o interrumpirlos por completo, a menudo sin sustituirlos por otra forma de control de la natalidad). Aunque los condones masculinos son la forma de anticoncepción reversible más utilizada (la esterilización femenina es la forma de anticoncepción más común en general), todavía existen percepciones que pueden inhibir su uso constante (por ejemplo, que el uso de condones disminuye el placer). Algunos adolescentes pueden no sentirse capaces de hablar sobre el uso del condón con una pareja sexual o pueden no insistir en el uso del condón durante el coito vaginal o anal.
Los adolescentes deben ser asesorados por su médico de atención primaria sobre la anticoncepción y sobre las prácticas sexuales seguras para prevenir las infecciones de transmisión sexual, y algunas escuelas y organizaciones de salud pública también proporcionan asesoramiento o varios tipos de anticonceptivos. Los médicos de atención primaria en los Estados Unidos que proporcionan asesoramiento sobre anticoncepción y pruebas y tratamiento de las infecciones de transmisión sexual deben estar familiarizados con las leyes estatales relacionadas con la confidencialidad (1).
Embarazo en adolescentes
El embarazo puede ser una fuente de estrés emocional significativo para los adolescentes. Las adolescentes embarazadas y sus parejas tienden a abandonar la escuela o la formación profesional, lo que empeora su situación económica y puede afectar su autoestima o sus relaciones sociales. Los adolescentes deben ser asesorados sobre las opciones, incluyendo la crianza de los hijos, la adopción e interrupción del embarazo. Según una declaración de política de la American Academy of Pediatrics, la mayoría de las evidencias disponibles no avalan las preocupaciones sobre un aumento a largo plazo en los problemas de salud mental relacionados con el aborto inducido (2). Ante la interrupción del embarazo, los médicos deben proporcionar asesoramiento y educación sobre los métodos anticonceptivos a los adolescentes (y a todos los pacientes), como parte del proceso.
Las adolescentes embarazadas son menos propensas que los adultos a recibir atención prenatal, lo que resulta en consecuencias obstétricas y neonatales menos favorables, que incluyen, en la embarazada, un mayor riesgo de anemia, trabajo de parto pretérmino, y preeclampsia; y en el recién nacido, mayor riesgo de bajo peso al nacer, infección y síndrome de muerte súbita del lactante (3). Los riesgos parecen aumentar en los adolescentes más jóvenes; por ejemplo, un estudio encontró que el riesgo de parto prematuro era significativamente mayor en las adolescentes embarazadas de 10 a 13 años en comparación con las de 14 años o más (4).
Los progenitores pueden presentar diferentes reacciones cuando su hija adolescente se queda embarazada o su hijo adolescente mantiene una relación con una embarazada. Algunos padres se sienten contentos y otros, angustiados, por lo que las emociones pueden variar desde la excitación hasta la apatía, la decepción o incluso la ira. Es importante que los padres expresen su apoyo y disposición para ayudar a los adolescentes a determinar sus elecciones. Los padres y los adolescentes necesitan comunicarse abiertamente sobre el aborto, la adopción y la paternidad—todas las opciones difíciles para el adolescente que lucha solo. Sin embargo, antes de revelar un embarazo a los padres, los médicos deben investigar la posibilidad de abuso de la adolescente embarazada por un padre, porque la revelación del embarazo puede poner a los adolescentes vulnerables en mayor riesgo.
Referencias
1. Guttmacher: State Laws and Policies: Minors’ Access to Contraceptive Services. Accessed October 22, 2024.
2. AMERICAN ACADEMY OF PEDIATRICS; COMMITTEE ON ADOLESCENCE. Options Counseling for the Pregnant Adolescent Patient. Pediatrics. 2022;150(3):e2022058781. doi:10.1542/peds.2022-058781
3. McCarthy FP, O'Brien U, Kenny LC. The management of teenage pregnancy. BMJ. 2014;349:g5887. Published 2014 Oct 15. doi:10.1136/bmj.g5887
4. Pineles BL, Harris AD, Goodman KE. Adverse Maternal and Delivery Outcomes in Children and Very Young (Age ≤ 13 Years) US Adolescents Compared With Older Adolescents and Adults. JAMA. 2022;328(17):1766-1768. doi:10.1001/jama.2022.18340