Los divertículos esofágicos son evaginaciones anómalas o bolsillos en el esófago. En muy pocos casos, provocan dificultad para deglutir y regurgitación (expulsión de comida sin presencia de náuseas ni contracciones violentas de los músculos del abdomen).
La causa depende del tipo de divertículos.
Los síntomas incluyen regurgitación de comida y dificultad para tragar.
El diagnóstico se basa en los resultados de una radiografía de tránsito baritado y, a menudo, una endoscopia digestiva alta.
Cuando sea necesario, el tratamiento incluye cirugía.
El esófago es el tubo hueco que comunica la garganta (faringe) con el estómago. (Véase también Introducción al esófago.)
Foto proporcionada por David M. Martin, MD.
Hay varios tipos de divertículos esofágicos. Cada uno tiene un origen diferente, pero probablemente todos están relacionados con trastornos en la coordinación de la deglución y de la relajación muscular. Muchos de estos divertículos están asociados con trastornos de motilidad del esófago, como el espasmo esofágico y la acalasia.
Divertículos de Zenker (divertículos faríngeos)
El divertículo de Zenker es probablemente causado por una incoordinación entre el paso del alimento fuera de la boca y la relajación del músculo cricofaríngeo (incoordinación cricofaríngea). Este divertículo puede llenarse de comida, que se puede regurgitar cuando la persona se inclina o se tumba. Esta regurgitación también puede provocar que el alimento sea aspirado al interior de los pulmones durante el sueño, provocando una neumonía por aspiración.
En casos muy poco frecuentes, el divertículo aumenta de tamaño y causa dificultad para tragar (disfagia) y a veces hinchazón en el cuello.
Divertículos del tercio medio del esófago (divertículos por tracción)
Los divertículos del tercio medio del esófago tienen su origen en la inflamación localizada en la cavidad torácica fuera del esófago que tira de éste o bien en trastornos de la motilidad esofágica.
Un divertículo del tercio medio del esófago no suele causar síntomas, pero sí puede hacerlo el trastorno de la motilidad subyacente.
Divertículos epifrénicos
El divertículo epifrénico es el que se sitúa justo por encima del diafragma (el músculo que separa el tórax del abdomen) y suele presentarse asociado a un trastorno de la motilidad (como la acalasia o el espasmo esofágico).
Los divertículos epifrénicos no suelen causar síntomas, pero sí puede hacerlo el trastorno de la motilidad subyacente.
Diagnóstico de las bolsas esofágicas
Radiografía de tránsito baritado
A menudo, endoscopia digestiva alta
Los médicos diagnostican todos los tipos de divertículos esofágicos haciendo un tránsito baritado (esofograma). En esta prueba, se administra a la persona bario mezclado con un líquido antes de la radiografía. El bario perfila el esófago y facilita así la identificación de las anomalías. A veces el tránsito baritado se graba en vídeo para que los médicos puedan registrarlo.
Los médicos a menudo solicitan una endoscopia digestiva alta para confirmar el diagnóstico. Durante una endoscopia digestiva alta, los médicos exploran el esófago mediante un tubo flexible llamado endoscopio.
Tratamiento de las bolsas esofágicas
Por lo general, no se aplica tratamiento
En ciertas ocasiones, intervención quirúrgica
No suele ser necesario tratar los divertículos.
No obstante, si los síntomas son graves o el divertículo es grande, puede extirparse quirúrgicamente.
En el caso de divertículos asociados a trastornos de la motilidad hay que tratar la enfermedad subyacente. Por ejemplo, si un divertículo de Zenker está causado por un mal funcionamiento del músculo cricofaríngeo, el médico puede cortar el músculo (un procedimiento denominado miotomía) al extirpar el divertículo de Zenker.