La dermatitis por estasis es una inflamación de la piel en la parte inferior de las piernas ocasionada por el estancamiento de sangre y líquidos.
(Véase también Introducción a la dermatitis.)
La dermatitis por estasis ocurre en personas que tienen hinchazón crónica (edema) debido a la insuficiencia venosa crónica de la parte inferior de las piernas, un daño en las venas de las piernas que impide que la sangre fluya normalmente; a la insuficiencia cardíaca; o al linfedema.
La dermatitis por estasis generalmente se produce en las espinillas, pero también puede afectar a otras áreas propensas a la hinchazón, como los brazos después de la radioterapia dirigida a los ganglios linfáticos.
Síntomas de la dermatitis por estasis
Al principio, la piel presenta prurito, enrojecimiento, descamación y engrosamiento, por lo general en las espinillas.
Finalmente, algunas zonas de la piel pueden erosionarse y formar una llaga abierta (úlcera). En ocasiones, las úlceras se infectan con bacterias que causan celulitis (una infección bacteriana de la piel) y suelen ser dolorosas.
Cuando la insuficiencia venosa crónica es la causa, la piel puede volverse de color amarillo-marrón, se suelen desarrollar varices (venas dilatadas y retorcidas) y la piel se vuelve dura, gruesa, dolorosa y sensible. Esta complicación se denomina lipodermatosclerosis. La lipodermatosclerosis le da a la parte inferior de la pierna una forma de boliche invertida con agrandamiento de la pantorrilla y estrechamiento del tobillo.
Diagnóstico de dermatitis por estasis
El aspecto de la piel y la presencia de insuficiencia venosa crónica
Posiblemente, ecografía
Los médicos diagnostican la dermatitis por estasis en personas que presentan los cambios característicos en la piel y otros síntomas de hinchazón de las piernas e insuficiencia venosa crónica.
A veces se requiere una exploración más detallada y pruebas de diagnóstico por la imagen (como la ecografía).
Tratamiento de la dermatitis por estasis
Medidas para prevenir la acumulación de sangre en las piernas
Medidas para aliviar la dermatitis
Para las úlceras, vendajes especiales o una bota de Unna
Para la infección, antibióticos
Se trata la causa de la hinchazón crónica.
Tratamiento de la insuficiencia venosa crónica
El tratamiento a largo plazo tiene la finalidad de tratar la insuficiencia venosa crónica evitando que la sangre se estanque en las venas alrededor de los tobillos.
Se deben elevar las piernas por encima del nivel del corazón varias veces al día (aproximadamente cada 2 horas) y mientras se duerme, si es posible. .
Las medias elásticas (medias de compresión) recomendadas por el médico ejercen la presión apropiada, impiden el estancamiento de la sangre y disminuyen la hinchazón. Las medias que se venden con este fin en los centros comerciales no suelen ser adecuadas.
Tratamiento de la dermatitis
Para la dermatitis que ha comenzado recientemente, y si no hay úlceras, puede ser útil aplicar una crema o ungüento con corticoesteroides en las áreas afectadas. Si la enfermedad empeora, como pueden evidenciarlo el aumento de temperatura, el enrojecimiento, la supuración o la presencia de pequeñas úlceras, se puede emplear un vendaje más absorbente, como uno hidrocoloide.
En la dermatitis por estasis, la piel se irrita con facilidad. No deben utilizarse cremas con antibióticos, cremas de primeros auxilios (anestésicas), alcohol de lana, solución de hamamelis, lanolina ni otras sustancias químicas porque pueden empeorar la enfermedad.
Tratamiento de las úlceras
Las úlceras se tratan mejor con compresas y apósitos hechos con pasta de óxido de cinc. Se utilizan vendas húmedas especiales que contienen hidrocoloides o hidrogel.
Algunas personas pueden necesitar una bota de pasta de Unna, que es una envoltura de tejido elástico con una pasta gelatinosa que contiene cinc. Esta envoltura se aplica al tobillo y la parte inferior de la pierna, donde se endurece de forma similar a una escayola, pero con una consistencia más blanda. La bota limita la hinchazón y contribuye a proteger la piel de la irritación, mientras que la pasta cura la piel. Al principio la bota se cambia cada 2 o 3 días, pero posteriormente se cambia únicamente una o dos veces por semana. Una vez curada la úlcera, debe aplicarse un soporte elástico antes de levantarse por la mañana. Independientemente del vendaje utilizado, la reducción de la hinchazón (generalmente por compresión) es esencial para la curación.
Los antibióticos aplicados a la piel son útiles para tratar algunas áreas abiertas o irritadas de la piel, así como úlceras. Los antibióticos administrados por vía oral se utilizan para tratar la celulitis.
En ocasiones se realizan injertos de piel de otras partes del cuerpo para cubrir úlceras demasiado grandes.