Por lo general, un parto transcurre sin ningún problema. Los problemas graves son relativamente poco frecuentes y los médicos suelen detectarlos y tratarlos. Las visitas regulares a un médico o una comadrona certificada durante el embarazo son importantes para tener un embarazo saludable y detectar problemas en caso de que se produzcan. Algunos problemas aparecen de forma repentina e inesperada, por lo que las mujeres embarazadas deben llamar a su médico o matrona si algo les parece mal (como sangrado, disminución del movimiento fetal).
Entre los ejemplos de problemas (complicaciones) que pueden aparecer o hacerse evidentes solo después de que una mujer embarazada inicie el trabajo de parto o durante el parto se encuentran:
Infección intraamniótica (infección e inflamación resultante de los tejidos que rodean al feto)
Distocia de hombro (el hombro del feto presiona contra el hueso púbico de la mujer y el bebé queda atrapado en el canal del parto)
Prolapso del cordón umbilical (el cordón umbilical sale del canal de parto antes que el bebé)
Desprendimiento del útero (raro)
Embolia de líquido amniótico (el líquido que rodea al feto en el útero penetra en el torrente sanguíneo materno y a veces provoca una reacción que pone en peligro la vida)
Hemorragia posparto (sangrado uterino excesivo en el parto)
Placenta accreta (un problema en la placenta que se puede descubrir durante el embarazo o solo después del parto)
Inversión uterina (un útero al revés)
Cuando se desarrollan complicaciones pueden ser necesarias alternativas al parto espontáneo por vía vaginal. Entre estos factores se incluyen los siguientes
El parto comenzó con medicamentos (inducción del parto)
Fórceps o un dispositivo de vacío (ventosa) (llamado parto vaginal instrumentado) para expulsar el bebé
Desarrollo temporal del parto
La duración media del embarazo es de 40 semanas, contadas a partir del primer día de la última menstruación. La fecha prevista para el parto se establece en 40 semanas, pero se trata de una estimación. La mayoría de las mujeres no dan a luz exactamente en la fecha prevista, pero algunas sí lo hacen.
El parto puede comenzar
Demasiado pronto (trabajo prematuro): antes de la semana 37 de embarazo
Tarde (postérmino): después de la semana 42 de embarazo
Si un bebé nace demasiado pronto o demasiado tarde, existe el riesgo de aparición de problemas de salud.
El parto puede adelantarse o retrasarse porque la mujer o el feto presentan algún problema médico o porque la posición del feto es anómala.
Resulta difícil determinar la duración del embarazo, ya que a menudo no puede establecerse la fecha exacta de la concepción. Al principio del embarazo, una ecografía puede ayudar a determinar su duración. Desde mediados del embarazo y hasta el final de este, las pruebas mediante ultrasonidos son menos fiables para determinar el tiempo del embarazo.