Anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis)

(Enfermedad de la hemoglobina S)

PorGloria F. Gerber, MD, Johns Hopkins School of Medicine, Division of Hematology
Revisado/Modificado abr 2024
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Datos clave

La anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis) es una anomalía genética hereditaria de la hemoglobina (la proteína presente en los glóbulos rojos que transporta el oxígeno) caracterizada por la presencia de glóbulos rojos en forma de hoz (media luna) y anemia crónica, causada por una excesiva destrucción de dichos glóbulos rojos anómalos.

  • Las personas afectadas presentan anemia y a veces ictericia.

  • El dolor en los huesos largos, el abdomen y el tórax, puede indicar una crisis de células falciformes.

  • El empeoramiento de la anemia, la fiebre, la dificultad respiratoria y las concentraciones bajas de oxígeno pueden indicar un síndrome torácico agudo, una complicación importante de la anemia de células falciformes.

  • Para determinar si una persona tiene anemia de células falciformes se utiliza un análisis de sangre especial denominado electroforesis.

  • Ayuda a prevenir las crisis la evitación de las actividades que pueden provocarlas y el tratamiento precoz de las infecciones y otros trastornos.

(Véase también Introducción a la anemia.)

La anemia de células falciformes (anemia drepanocítica) es más común en personas con ascendencia africana o afroamericana En Estados Unidos, por ejemplo, aproximadamente el 8% de la población afroamericana tiene una copia del gen de la anemia drepanocítica (es decir, presentan el rasgo drepanocítico). Las personas que tienen el rasgo drepanocítico no desarrollan la enfermedad, aunque presentan un mayor riesgo de sufrir algunas complicaciones como la presencia de sangre en la orina. En Estados Unidos, alrededor del 0,3% de las personas con ascendencia africana o afroamericana poseen dos copias del gen. Estas personas desarrollan la enfermedad.

Formas de los glóbulos rojos

Los glóbulos rojos normales son flexibles, tienen forma de disco y son más gruesos en los bordes que en el centro. En varios trastornos hereditarios, los glóbulos rojos se vuelven esféricos (en la esferocitosis hereditaria), ovalados (en la eliptocitosis hereditaria) o adoptan una forma de hoz (en la anemia drepanocítica o de células falciformes).

En la anemia de células falciformes, los glóbulos rojos (eritrocitos) tienen una forma anormal de hemoglobina (proteína que transporta oxígeno). La forma de hemoglobina anormal se llama hemoglobina S. Cuando los glóbulos rojos contienen hemoglobina S, pueden perder su forma y adquirir la forma de una hoz y perder flexibilidad. Esto no ocurre con todos los glóbulos rojos. Los drepanocitos o células falciformes son más numerosos en caso de infecciones o niveles bajos de oxígeno en la sangre.

Las células falciformes son frágiles y han acortado la supervivencia. Las células dañadas también se eliminan de la circulación. Las células falciformes son rígidas y se adhieren entre sí, por lo que tienen dificultades para viajar a través de los vasos sanguíneos más finos (capilares), lo que bloquea el flujo sanguíneo y reduce el suministro de oxígeno a los tejidos en las áreas donde los capilares están bloqueados. La interrupción del flujo sanguíneo causa dolor y, con el tiempo, lesiones en el bazo, los riñones, el cerebro, los huesos y otros órganos. Además, puede producir insuficiencia renal e insuficiencia cardíaca.

Síntomas de la anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis)

Las personas con drepanocitosis siempre presentan cierto grado de anemia (que a menudo les provoca fatiga, debilidad y palidez) y pueden presentar una leve ictericia (color amarillento de la piel y del blanco de los ojos). Algunas personas presentan pocos síntomas. Otras tienen síntomas graves, repetitivos, que causan discapacidad importante y muerte prematura.

Rasgo falciforme

En las personas con anemia de células falciformes, los glóbulos rojos de la sangre no son frágiles y no se rompen fácilmente. El rasgo de células falciformes no causa crisis dolorosas.

Las personas con rasgo drepanocítico presentan un riesgo más elevado de sufrir enfermedad renal crónica y embolia pulmonar. En raras ocasiones, pueden detectar sangre en su orina. Las personas con rasgo de células falciformes también están en riesgo de sufrir una forma extremadamente poco frecuente de cáncer de riñón. Las personas con rasgo de células falciformes tienen una esperanza de vida normal. En raras ocasiones se han informado casos de muerte súbita asociados a una actividad física muy extenuante y una deshidratación grave.

Crisis drepanocítica

Cualquier circunstancia que reduzca la cantidad de oxígeno en la sangre, las bajas temperaturas o una enfermedad pueden provocar una crisis de anemia de células falciformes (también llamada exacerbación). Esta crisis de dolor (vaso-oclusiva) en la anemia de células falciformes es un episodio de aumento de los síntomas y puede consistir en un empeoramiento de los síntomas de la anemia, tales como dolor (a menudo en el pecho o en los huesos largos de brazos y piernas), y a veces dificultad respiratoria. El dolor abdominal puede ser intenso y pueden producirse vómitos, de modo que debe considerarse la posibilidad de secuestro esplénico o hepático. A veces, las complicaciones adicionales ocurren, incluyendo

  • Crisis aplásica: la producción de glóbulos rojos en la médula ósea se detiene durante la infección con algunos virus

  • Síndrome torácico agudo: causado por la obstrucción de los capilares de los pulmones o infección

  • Secuestro esplénico o hepático (hígado) agudo (una gran acumulación de células en un órgano): aumento rápido del tamaño del bazo o del hígado

El síndrome torácico agudo puede darse en personas de todas las edades, pero es más frecuente en niños. Por lo general se caracteriza por dolor intenso y dificultad para respirar. El síndrome torácico agudo puede ser mortal.

En los niños, puede producirse un secuestro agudo de células falciformes en el bazo (crisis de secuestro) que causa un aumento del tamaño del bazo y exacerba la anemia. El secuestro hepático (hígado) agudo es menos frecuente y puede ocurrir a cualquier edad.

Complicaciones

La mayoría de las personas que padecen anemia de células falciformes presentan agrandamiento del bazo durante la infancia porque las células falciformes se quedan atrapadas en dicho órgano. En la adolescencia, suele estar tan lesionado que se contrae y deja de funcionar. Como el bazo ayuda a combatir la infección, las personas que padecen anemia drepanocítica son más propensas a desarrollar neumonía por neumococo u otras infecciones. Las infecciones, en especial las víricas, pueden reducir la producción de glóbulos rojos sanguíneos, de tal manera que la anemia se torna más grave.

El hígado se agranda progresivamente a lo largo de la vida (provocando plenitud abdominal) y a menudo se forman cálculos biliares a partir del pigmento que liberan los glóbulos rojos fragmentados.

El corazón suele aumentar de tamaño, y un corazón hipertrofiado es menos eficaz en el bombeo de sangre al cuerpo, lo que posiblemente acabará provocando una insuficiencia cardíaca. Los soplos cardíacos son frecuentes.

Los niños que padecen anemia drepanocítica suelen tener un torso relativamente corto, pero sus brazos, piernas, dedos de las manos y dedos de los pies son largos. Las alteraciones en los huesos y la médula ósea causa dolor óseo, especialmente en las manos y en los pies. Pueden presentarse episodios de dolor articular y es probable que la articulación de la cadera llegue a dañarse tanto, que finalmente tenga que ser reemplazada.

La falta de circulación en la piel causa úlceras en las piernas, sobre todo en los tobillos. Con frecuencia, los varones jóvenes padecen erecciones persistentes y dolorosas (priapismo). Los episodios de priapismo pueden dañar permanentemente el pene, de modo que ya no se pueden producir erecciones. El bloqueo de los vasos sanguíneos provoca accidentes cerebrovasculares, que dañan el sistema nervioso. En las personas mayores, se deterioran las funciones pulmonar y renal.

Diagnóstico de anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis)

  • Análisis de sangre

  • Electroforesis de hemoglobina

  • Prueba prenatal

Cuando se sospecha anemia drepanocítica, debe realizarse un análisis de sangre. En una muestra de sangre examinada al microscopio se observan glóbulos rojos en forma de hoz y fragmentos de glóbulos rojos destruidos.

También se realiza otra prueba sanguínea, la electroforesis de hemoglobina. En la electroforesis, se utiliza una corriente eléctrica para separar los diferentes tipos de hemoglobina y se detecta, por lo tanto, la hemoglobina anormal.

Puede ser necesario realizar más pruebas, dependiendo de los síntomas específicos que la persona experimenta durante la crisis. Por ejemplo, si tiene dificultad para respirar o fiebre, puede hacerse una radiografía de tórax.

Cribado

Deben realizarse análisis sanguíneos en los familiares de personas que padezcan este trastorno, ya que también pueden tener la enfermedad o el rasgo drepanocítico o de células falciformes. Descubrir el rasgo drepanocítico es importante para la planificación familiar, para determinar el riesgo de tener un niño con anemia drepanocítica.

En Estados Unidos, los recién nacidos son examinados sistemáticamente mediante un análisis de sangre.

Pueden hacerse análisis durante los primeros meses del embarazo para controlar el feto y permitir un asesoramiento prenatal para las parejas que están en riesgo de tener un niño con anemia drepanocítica. Las células fetales obtenidas mediante amniocentesis o biopsia de vellosidades coriónicas se estudian para detectar la presencia del gen de la anemia drepanocítica.

Tratamiento de la anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis)

  • Los tratamientos se dirigen a la prevención de las crisis

  • Tratamiento de las crisis y de los trastornos que las causan

El tratamiento se dirige a controlar

  • Prevención de las crisis

  • Control de la anemia

  • Aliviar los síntomas

Un trasplante de células madre puede curar la anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis). La persona afectada por esta enfermedad puede ser receptora de un trasplante de médula ósea o de células madre de un miembro de su familia o de otro donante que no tenga el gen de la anemia drepanocítica. Dicho trasplante puede ser curativo.

La terapia génica, una técnica en la que se implantan genes normales en las células precursoras (células que producen células sanguíneas), está ya disponible.

Prevención de las crisis por anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis)

Las personas que padecen enfermedad de células falciformes han de evitar las actividades que reducen la cantidad de oxígeno en la sangre y buscar atención médica inmediata aun cuando presenten enfermedades menores, como, por ejemplo, algunas infecciones víricas. Como tienen un mayor riesgo de infección, deben recibir las vacunas neumocócica, meningocócica, y contra la gripe, Haemophilus influenzae de tipo b. También se recomienda la vacunación contra la COVID-19. Los niños suelen tomar penicilina por vía oral hasta los 5 años de edad como mínimo.

Algunos fármacos ayudan a controlar la anemia drepanocítica. Por ejemplo, la hidroxiurea incrementa la producción de una forma de hemoglobina encontrada principalmente en fetos, que disminuye la cantidad de glóbulos rojos (eritrocitos) que adquieren forma de hoz. Por lo tanto, reduce la frecuencia de las crisis drepanocíticas y del síndrome torácico agudo.

Otros fármacos que pueden ayudar a controlar los síntomas y las complicaciones de la anemia de células falciformes son L-glutamina, crizanlizumab y voxelotor.

Control de la anemia

Se suministra ácido fólico, una vitamina que ayuda al cuerpo a producir nuevos glóbulos rojos.

Pueden realizarse transfusiones de sangre para revertir la anemia.

Tratamiento de las crisis por anemia de células falciformes (anemia drepanocítica o drepanocitosis)

Las crisis drepanocíticas requieren a veces hospitalización. Las personas reciben oxígeno y líquidos por vía intravenosa, según sea necesario, y medicamentos para aliviar el dolor. Se pueden administrar transfusiones de sangre y oxígeno. Asimismo, deben tratarse los trastornos que provocan las crisis, como, por ejemplo, una infección.

Más información

El siguiente recurso en inglés puede ser útil. Tenga en cuenta que el MANUAL no se hace responsable del contenido de este recurso.

  1. Sickle Cell Disease Association of America: (Asociación estadounidense para la anemia de células falciformes): proporciona educación integral y apoyo, incluyendo tutoría entre pares, a las personas con anemia de células falciformes y a sus cuidadores

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