La taquipnea transitoria del recién nacido es una respiración temporalmente rápida y algunas veces fatigosa que se presenta, a menudo, con concentraciones bajas de oxígeno en sangre debidas al exceso de líquido en los pulmones después del nacimiento.
Este trastorno puede ocurrir en recién nacidos prematuros o en recién nacidos a término que presentan ciertos factores de riesgo.
Los recién nacidos afectados respiran de forma rápida y resoplan al espirar, y presentan un aspecto azulado o gris si su sangre no recibe suficiente oxígeno.
El diagnóstico se basa en la frecuencia y la dificultad respiratoria y puede confirmarse con una radiografía de tórax.
Algunos recién nacidos afectados necesitan tratamiento con oxígeno y, en pocos casos, ayuda respiratoria.
La característica de este trastorno es que es temporal (transitorio) y que casi todos los recién nacidos afectados se recuperan completamente en 2 o 3 días.
(Véase también Introducción a los problemas generales de los recién nacidos.)
Taquipnea significa respiración rápida. La taquipnea transitoria significa respiración rápida temporal.
Antes del nacimiento, los sacos de aire (alvéolos) de los pulmones están llenos de líquido. Inmediatamente después del nacimiento, el líquido debe ser eliminado de los pulmones para que los sacos de aire se llenen y el recién nacido pueda respirar normalmente. Las hormonas liberadas durante el trabajo de parto hacen que las células de los sacos de aire empiecen a absorber líquido. Algo del líquido es eliminado de los pulmones por la presión ejercida sobre el tórax durante el parto. La mayoría de los fluidos son rápidamente reabsorbidos directamente por las células que recubren los sacos de aire. Si esta reabsorción de líquido no ocurre de forma rápida, los sacos de aire continúan parcialmente llenos de líquido y los recién nacidos pueden tener dificultades respiratorias (dificultad respiratoria).
La taquipnea transitoria del recién nacido es más frecuente entre recién nacidos prematuros (nacidos antes de las 37 semanas de gestación) y recién nacidos a término (entre 37 semanas y 42 semanas de gestación) que presentan ciertos factores de riesgo. Por ejemplo, en los recién nacidos a término, la taquipnea transitoria es más común entre los nacidos a través de un parto por cesárea, especialmente cuando la madre no se puso de parto primero. También es más común entre los recién nacidos a término, especialmente los varones, cuya madre sufrió diabetes, asma o ambas durante el embarazo.
Síntomas de la taquipnea transitoria del recién nacido
Los recién nacidos con taquipnea transitoria presentan dificultad respiratoria casi inmediatamente después del nacimiento. El síntoma más frecuente es la respiración rápida (taquipnea).
Los síntomas menos frecuentes consisten en retracciones (tirones de los músculos torácicos unidos a las costillas y por debajo de estas durante la respiración rápida), ensanchamiento de las aletas nasales en la inspiración y resoplidos en la espiración.
Si la concentración de oxígeno en sangre es baja, los recién nacidos desarrollan una coloración azulada o gris de la piel y/o los labios (cianosis). En los recién nacidos de color, la piel puede cambiar a colores como amarillo-gris, gris o blanco. Estos cambios pueden verse más fácilmente en las membranas mucosas que recubren el interior de la boca, la nariz y los párpados.
Diagnóstico de taquipnea transitoria del recién nacido
Frecuencia respiratoria y dificultad respiratoria
Radiografía de tórax
Análisis de sangre y hemocultivos según sea necesario
Los médicos sospechan taquipnea transitoria en los recién nacidos que presentan respiración rápida y difícil poco después del nacimiento.
Los médicos solicitan una radiografía de tórax y análisis de sangre y hemocultivos para descartar otros trastornos que causan síntomas similares, como una infección de la sangre (sepsis), una neumonía o un síndrome de dificultad respiratoria.
Tratamiento de la taquipnea transitoria del recién nacido
Oxígeno
Algunas veces, otras medidas para apoyar la respiración
Algunas veces los recién nacidos necesitan recibir oxígeno a través de un tubo con dos cánulas nasales introducido en las fosas nasales para que respiren aire con mayor contenido de oxígeno que el aire de la habitación.
Con escasa frecuencia, algunos recién nacidos necesitan presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP, una técnica que permite al recién nacido respirar espontáneamente suministrándole oxígeno ligeramente presurizado o aire mediante una cánula nasal) y en algunas ocasiones un ventilador (una máquina que ayuda a introducir y extraer el aire de los pulmones).
Pronóstico de la taquipnea transitoria del recién nacido
La mayoría de los recién nacidos con taquipnea transitoria se recuperan completamente en 2 o 3 días sin tratamiento o con un breve periodo de oxígeno añadido.
Incluso con tratamiento, un muy pequeño número de lactantes desarrollan hipertensión en los pulmones (hipertensión pulmonar persistente) o colapso pulmonar (neumotórax).
