Ciertas marcas en la piel del recién nacido se consideran normales.
En la cara y en el cuero cabelludo del recién nacido pueden aparecer oretones o marcas que pueden estar causadas por la presión al atravesar el canal del parto y/o el uso de fórceps o un dispositivo extractor de vacío (ventosa). Después de un parto de nalgas pueden aparecer contusiones en las piernas y en los pies. Estos moretones suelen desaparecer en pocos días.
A veces aparecen marcas rosadas producidas por la presencia de capilares dilatados bajo la piel, en la frente justo por encima de la nariz, en la parte superior de los párpados o en la parte posterior del cuello (la denominada «marca de la cigüeña»). Este tipo de marca de nacimiento se va decolorando a medida que el bebé crece, pero en algunas personas permanece como una marca muy leve que se hace más evidente cuando el niño se agita o se enfada.
Los quistes de milia (acné miliar o neonatal) son pequeños quistes perlados blancos comunes que se encuentran normalmente alrededor de la nariz y las mejillas. Son producidos por la obstrucción de los conductos de las glándulas sudoríparas. Los quistes miliares se hacen más pequeños o desaparecen en unas semanas.
Algunas veces se encuentran quistes blancos o amarillentos (denominados perlas de Epstein) en las encías o en la línea media del paladar. No requieren tratamiento. Estos quistes desaparecen al cabo de 1 a 2 semanas.
En la zona lumbar o en las nalgas pueden aparecer manchas planas de color azul o gris (anteriormente llamadas manchas mongólicas). Se pueden confundir con hematomas. Ocurren con mayor frecuencia en recién nacidos con ascendencia africana, latinoamericana o asiática. Tienden a parecer menos evidentes con la edad y no requieren tratamiento.
Los hemangiomas infantiles (hemangiomas en fresa) son marcas de nacimiento comunes. Provocan que la piel se ponga roja o azulada y pueden aparecer en cualquier parte de la piel, generalmente en la cabeza y el cuello. Los hemangiomas del lactante aparecen poco después del nacimiento y suelen agrandarse rápidamente durante el primer año de vida. Al cabo de 12 a 18 meses, los hemangiomas se reducen de tamaño y se vuelven pálidos, por lo que en su mayoría ya no son visibles cuando el niño alcanza la edad escolar. La mayoría de los hemangiomas no necesitan tratamiento, pero dependiendo de su tamaño y ubicación, a veces reciben tratamiento con láser o con un medicamento como propanolol.
Foto cortesía de Karen McKoy, MD.
Las manchas de vino de Oporto son manchas de nacimiento lisas y de color rosado, rojo o púrpura. Están causadas por vasos sanguíneos malformados. Las manchas en vino de Oporto pueden ser pequeñas o cubrir grandes superficies del cuerpo. Las manchas de vino de Oporto son inofensivas, pero algunas pueden formar parte de un trastorno neurocutáneo grave llamado síndrome de Sturge-Weber. Las alteraciones en la coloración de la piel son permanentes. La terapia con láser se puede usar para tratar algunas manchas de vino de Oporto.