La roséola infantil es una infección vírica contagiosa que afecta a los lactantes y a los niños muy pequeños y que cursa con fiebre alta seguida de exantema.
La roséola infantil está causada por una infección por el virus del herpes humano 6.
Los síntomas típicos incluyen fiebre alta que comienza repentinamente y, a veces, una erupción que se desarrolla después de que la temperatura vuelva a la normalidad.
El diagnóstico se basa en los síntomas y la edad del niño.
El objetivo del tratamiento es aliviar los síntomas.
La roséola infantil se da a lo largo de todo el año, con mayor frecuencia en primavera y en otoño. A veces se producen brotes locales menores.
La causa habitual de la roséola infantil es el herpesvirus 6, uno de los muchos herpesvirus humanos.
La mayoría de los niños que desarrollan roséola infantil tienen entre 6 meses y 3 años de edad.
La roséola infantil se transmite al inhalar pequeñas gotas expulsadas por una persona infectada. Las gotitas también se pueden inhalar mientras una persona infectada habla, tose o estornuda. Si las gotitas caen sobre las superficies y los niños tocan esas superficies y luego se tocan la nariz o la boca, pueden infectarse. La infección a menudo se transmite por contacto cercano con una persona que sufre la infección pero no presenta ningún síntoma, como puede suceder con un miembro de la familia. No se sabe cuándo las personas son contagiosas.
Una persona que ha tenido oséola infantil desarrolla inmunidad y generalmente no puede contraerla de nuevo.
Síntomas de la erupción causada por la roséola infantil
Los síntomas de la roséola infantil comienzan entre 5 y 15 días después de la infección. Empieza bruscamente un estado febril con temperaturas de 39,5 a 40,5° C y que dura de 3 a 5 días. Del 5 al 15% de los niños presentan convulsiones como resultado de la fiebre, especialmente cuando sube rápidamente en cuanto aparece. A pesar de la fiebre alta, el niño suele estar activo.
Algunos niños tienen un leve moqueo nasal, dolor de garganta o malestar gástrico.
Los ganglios linfáticos de la parte posterior de la cabeza, de los lados del cuello y de detrás de las orejas suelen estar inflamados.
La fiebre suele disminuir rápidamente al cuarto día.
Alrededor del 30% de los niños con roséola infantil manifiestan una erupción en pocas horas hasta, como máximo, un día después de bajar la fiebre. La erupción es roja y plana. Aparece mayoritariamente en el tórax y el abdomen y, de modo menos importante, en la cara, los brazos y las piernas. La erupción no produce picor y puede durar desde horas hasta 2 días.
Diagnóstico de la roséola infantil
Evaluación médica
El médico sospecha roséola infantil cuando los síntomas típicos (en particular el desarrollo de una erupción después de desaparecer la fiebre alta) aparecen en un niño de 6 meses a 3 años de edad.
No se suelen realizar pruebas, pero el diagnóstico de la rubéola infantil puede confirmarse con análisis de sangre.
Tratamiento de la erupción causada por la roséola infantil
Paracetamol (acetaminofeno) o ibuprofeno para la fiebre (para proporcionar bienestar)
La fiebre suele tratarse con paracetamol (acetaminofeno) o ibuprofeno.
Las convulsiones y la erupción no necesitan ningún tratamiento específico pero, dado que causan preocupación, la mayoría de los padres llevan al niño al médico para que lo examine.
En niños con un sistema inmunitario debilitado, si la enfermedad es grave, se intenta un tratamiento con los fármacos antivíricos foscarnet o ganciclovir.