¿Qué son las células madre?

Las células madre (progenitoras) son células indiferenciadas que tienen el potencial de convertirse en uno de los 200 tipos de células del organismo, incluidas las células sanguíneas, nerviosas, musculares, cardíacas, glandulares y cutáneas.

Se puede estimular a algunas células madre para que se conviertan en cualquier tipo de célula del organismo. Otras ya están parcialmente diferenciadas, por lo que solo se pueden transformar, por ejemplo, en algúnos tipos de células nerviosas.

Las células madre se dividen, con lo que producen más células madre, hasta que se les estimula para que se especialicen. Luego, a medida que continúan dividiéndose, se vuelven más y más especializadas, hasta que pierden la capacidad de convertirse en cualquier tipo de célula.

Se espera que las células madre puedan utilizarse para reparar o para reemplazar células de tejidos dañados o destruidos a causa de trastornos como la enfermedad de Parkinson, la diabetes y lesiones de la médula espinal. Al activar ciertos genes, se puede lograr que las células madre se especialicen y se conviertan en el tipo de células que deben ser reemplazadas.

En la actualidad se pueden obtener células madre de las fuentes siguientes:

  • Embriones

  • Feto

  • Sangre del cordón umbilical

  • Médula ósea de niños o adultos

  • Células madre pluripotentes inducidas (ciertas células de personas adultas que pueden ser modificadas para que se comporten como células madre)

Embriones: durante la fertilización in vitro, se colocan en una placa de cultivo espermatozoides procedentes del hombre y varios óvulos de la mujer. Un espermatozoide fecunda el óvulo y la célula resultante se divide, lo que da lugar a un embrión. Varios de los embriones de apariencia más saludable se colocan en el útero de la mujer, mientras que el resto se descartan o congelan para ser utilizados más tarde, si fuera necesario.

Las células madre se obtienen de los embriones no utilizados. Dado que, entonces, los embriones pierden la capacidad de crecer hasta formar un ser humano completo, el uso de células madre de embriones es objeto de controversia. No obstante, se piensa que esas células madre tienen un enorme potencial para producir diferentes tipos de células y para sobrevivir después de ser trasplantadas.

Fetos: después de 8 semanas de desarrollo, un embrión se denomina feto. Se pueden obtener células madre a partir de fetos provenientes de abortos espontáneos o provocados.

Cordón umbilical: se pueden obtener células madre de la sangre contenida en el cordón umbilical o en la placenta tras el nacimiento de un bebé. Estas células madre pueden producir distintos tipos de células sanguíneas.

Niños y adultos: la médula ósea y la sangre de niños y adultos contienen células madre que solo pueden producir células sanguíneas. Este tipo de células madre es el que se usa con más frecuencia en los trasplantes.

Células madre pluripotentes inducidas: se están investigando nuevas maneras de inducir a otras células (como las presentes en la sangre o en la piel) para actuar como células madre. Estas células se obtienen de adultos. Una manera de inducir a estas células consiste en inyectarles un material que afecta a sus genes mediante un proceso que se denomina reprogramación.

El desarrollo y el uso de células madre inducidas aún se encuentra en fase de experimentación.