En el interior de la nariz se encuentra la cavidad nasal, dividida en dos conductos por el tabique nasal. El tabique nasal está compuesto de hueso y de cartílago, y se extiende desde las fosas nasales hasta la parte posterior de la garganta.
Las úlceras (llagas) y los agujeros (perforaciones) del tabique nasal pueden ser consecuencia de
Cirugía nasal
Lesiones repetidas (como las provocadas al hurgarse la nariz continuamente)
Perforaciones estéticas (piercing)
Exposición a agentes tóxicos (como ácidos, vapores de cromo, fósforo y cobre)
Uso frecuente de pulverizadores nasales (incluidos los corticoesteroides y algunos fármacos de venta sin receta, como los aerosoles de fenilefrina u oximetazolina)
El oxígeno puro inhalado por la nariz, cuando se distribuye a través de gafas nasales o una mascarilla nasal
Trastornos autoinmunitarios o infecciones como la tuberculosis, la lepra, la granulomatosis con poliangitis (antes llamada granulomatosis de Wegener) y la sífilis.
El consumo frecuente de cocaína aspirada por la nariz (ya que reduce la irrigación sanguínea)
Síntomas de la perforación del tabique
Los síntomas pueden consistir en la formación de costras alrededor la úlcera o perforación, y en hemorragias nasales recurrentes. Al respirar, las personas con pequeñas perforaciones en el tabique emiten a veces un sonido similar a un silbido.
Diagnóstico de perforación del tabique
Evaluación médica
A veces, estudios de laboratorio y/o biopsia
Los médicos examinan la parte frontal de la nariz e insertan un endoscopio (un tubo de visualización flexible) para visualizar las perforaciones septales. Si los médicos sospechan que la causa de la perforación es una infección o un trastorno autoinmunitario, pueden ser necesarios cultivos para la infección, otros análisis de sangre y biopsia.
Tratamiento de la perforación del tabique
Pomada medicada o aerosol nasal de solución salina para las úlceras
En raras ocasiones, tratamiento quirúrgico de las perforaciones
A veces, medicamentos para tratar infecciones o trastornos autoinmunitarios
En caso de úlceras septales, la pomada de mupirocina reduce la formación de costras, como también puede hacerlo un aerosol nasal salino.
A veces las perforaciones septales pueden repararse quirúrgicamente utilizando tejido de la propia persona tomado de otra parte de la nariz, o mediante una membrana artificial compuesta por un plástico suave y flexible. La mayoría de las perforaciones no necesitan reparación, a menos que las hemorragias o las costras representen un problema importante.
Se administran medicamentos si la causa de la perforación es una infección o un trastorno autoinmunitario.